domingo, 13 de marzo de 2011

Japón lucha por evitar crisis nuclear (La peor desde 1945).

La tragedia que vive Japón desde hace tres días se agrava con el transcurso de las horas, Un nuevo estallido ha sacudido este lunes la central nuclear de Fukushima I, la más afectada de Japón por las averías derivadas del terremoto y el tsunami que sacudieron el país el viernes. Si el sábado fue el reactor número uno el que sufrió una explosión de hidrógeno, esta madrugada (hora española) se ha registrado otra similar en el número tres. Una gran columna de humo blanco emerge a estas horas de las instalaciones de la planta, pero según la empresa operadora el reactor ha quedado intacto. Nueve personas han resultado heridas en el incidente.
El portavoz del Gobierno japonés, Yukio Edano, afirma que existe la posibilidad de que se hayan producido importantes fugas de radiactividad. Por ello, según la agencia Kyodo, las autoridades han pedido a 600 residentes que no habían sido evacuados en un perímetro de 20 kilómetros alrededor del recinto que no salgan de sus casas hasta nueva orden.
Fukushima I entra así en su tercer día de emergencia nuclear con graves problemas en dos de sus reactores por un fallo en el sistema de refrigeración y el temor a que haya empezado la fusión del núcleo. Poco antes de la explosión en el reactor tres, el primer ministro japonés, Naoto Kan, admitía que esta planta sigue en un estado "alarmante", tras detectarse una nueva subida en los niveles de radiación por encima de los límites de seguridad (751,2 microsievert por hora, cuando lo normal son 500). Mientras se trabaja para atajar el sobrecalentamiento de los reactores, las autoridades luchan para que las cámaras de contención resistan la presión y los efectos de la nueva explosión para evitar una fuga descontrolada de radiactividad como sucedió en Chernóbil en 1986.
Pero el frente atómico no se ha quedado en Fukushima. En la tarde de ayer, la central de Tokai (a solo 120 kilómetros de Tokio) anunció que también tenía problemas de refrigeración en su reactor número dos. "Una bomba de agua alimentada por un generador diésel se paró por el tsunami, declaró a France Presse un portavoz de la eléctrica dueña de la nuclear, Atomic Power Company. Aun así, siempre según la empresa, estaban consiguiendo reducir de forma constante la temperatura del reactor.
Un nuevo frente de preocupación se abrió para las autoridades japonesas cuando se detectaron aumentos en los niveles de radiactividad en otra central nuclear, la de Oganawa, 70 kilómetros al norte de Sendai. Pero las autoridades descartaron problemas en la planta y aseguraron que el aumento de las emisiones se debió a la llegada de partículas de Fukushima, que está a unos 100 kilómetros. A las 22.00 (hora peninsular española), Tokio comunicó al Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA) que los niveles habían retornado a la normalidad.
Ante esta cascada de alertas, Kan se dirigió ayer por mensaje a la nación para hacer un dramático llamamiento a la unidad de sus 120 millones de ciudadanos. El primer ministro reconoció que la suma del terremoto, el tsunami y el peligro nuclear ha desatado "la peor crisis desde el final de la II Guerra Mundial".

No hay comentarios:

Publicar un comentario